A menudo sucede que incluso las personas con ingresos bastante altos no saben cómo administrar adecuadamente su dinero y, por lo tanto, no tienen independencia financiera.
Esto afecta negativamente el nivel de vida: una persona no puede desarrollarse y su situación financiera es inestable.
Crea una almohada financiera
Una cierta cantidad reservada en caso de circunstancias imprevistas es una necesidad que toda persona con conocimientos financieros debe prever. Muchos estaban convencidos de la corrección de este enfoque cuando, durante la cuarentena, un gran número de personas se quedaron sin trabajo, sin ahorros y en una situación difícil.
Usted mismo establece el tamaño del colchón financiero, sin embargo, muchos economistas recomiendan ahorrar hasta seis salarios y gastar este dinero solo en situaciones de emergencia. Así, incluso en caso de pérdida de una fuente de ingresos, será posible durante algún tiempo mantener la estabilidad material y el nivel de vida habitual y, al mismo tiempo, buscar nuevas formas de ganar dinero.
Controla tus ingresos y gastos
La disciplina en este aspecto ayudará con el tiempo a aprender a optimizar los gastos y ahorrar más dinero. Realice un pequeño experimento: durante un mes, mantenga un registro de absolutamente todos los gastos y luego determine qué gasta más dinero.
El resultado puede sorprenderte, ya que muchas personas gastan una parte importante de su presupuesto en compras impulsivas de las que fácilmente podrían prescindir, este es uno de los malos hábitos financieros. Así, el dinero se te escurre entre los dedos, pero mientras tanto, se puede utilizar de forma más racional, por ejemplo, invirtiéndolo o apartándolo para necesidades más importantes.
Haga crecer su capital
Este punto se deriva suavemente del anterior. ¿Qué hacer con el dinero liberado? ¡Haz que trabajen para ti! En el mundo moderno, casi todos pueden averiguar dónde y cómo invertir (en valores, bienes raíces u otros activos) correctamente.
Invertir una parte del capital en inversiones le permitirá asegurar otra fuente de ingresos, lo que significa un paso más hacia la independencia y estabilidad financiera.
Deja de vivir a crédito
Por supuesto, no estamos hablando de esas cosas necesarias que son muy difíciles de adquirir sin tomar un préstamo, por ejemplo, bienes raíces. Solo una pequeña parte de la población puede permitirse hacer una compra tan grande de una vez y por su propia cuenta.
Pero vale la pena pensar en la conveniencia de adquirir cosas menos significativas a crédito. Por ejemplo, incluyen artículos de lujo: equipos caros, un automóvil, etc. Además, la vieja diversión rusa sigue siendo muy popular: una boda a crédito. Al final, le paga al banco un gran interés y pierde su propio dinero. Le recomendamos que considere cuidadosamente tales transacciones y, si es posible, rechace los préstamos a menos que sea absolutamente necesario y viva «dentro de sus posibilidades».
Establecer objetivos
Acumular dinero sin rumbo suele ser una idea fallida, por lo que siempre es necesario trazar metas financieras y hacer un plan para su implementación. Al mismo tiempo, es necesario dividir los objetivos en corto y largo plazo, e ir gradualmente hacia la implementación de cada uno de ellos.
Este enfoque le permitirá lograr la independencia financiera y definir claramente las formas de lograr sus objetivos.