La Ley de Pareto, conocida como el principio 80/20, encuentra una aplicación bastante exitosa no solo en la vida, sino también en los negocios.
Pasando suficiente tiempo entre la nobleza italiana, Pareto descubrió que el 80% del capital italiano recae en una quinta parte de las familias más ricas del país, describiendo la desigualdad de clases total, en la que un pequeño grupo de ciudadanos puede tener un impacto bastante significativo en la vida pública. como un todo.
Más tarde, el sociólogo demostró que se pueden lograr resultados realmente impresionantes con mucho menos esfuerzo. Aunque Pareto es el autor de una serie de correlaciones sociológicas, es más famoso en relación con la ley del 20/80, que lleva su nombre.
Regla de Pareto
Solo unos pocos de los muchos hechos significativos e insignificantes son efectivos. Cualquier tarea tiene ciertos matices que la distinguen de lo que parece en una primera presentación.
Es debido a estos matices que a menudo surge una diferencia bastante significativa entre las expectativas y el resultado final. Dado que la gran mayoría de los esfuerzos realizados no arrojan resultados significativos, las fuerzas se desperdician en vano.
El resultado exitoso y el fracaso se deben principalmente a la productividad y la destructividad de las acciones, respectivamente. En caso de que el proyecto que se está implementando no traiga beneficios prácticos reales, se deben hacer ciertos ajustes. Vale la pena señalar que los principios anteriores, que están bastante bien adaptados hasta la fecha, son bastante simples.
Crítica al principio
La Ley 20/80, como la gran mayoría de otros productos intelectuales, ha sido criticada repetidamente, principalmente por matemáticos. Se pudo probar que la razón derivada por Pareto es solo una observación empírica y puede fluctuar, por lo que pueden aparecer razones de 30/70 o 40/60. Además, se pudo establecer que el resultado final está influenciado por una serie de factores, no siendo posible evaluar cada uno de ellos.
Así, es imposible afirmar con plena confianza que el nivel de influencia de cada uno de los factores es del 20%, mientras que la eficiencia total es del 80%. Este es precisamente el principal inconveniente de la ley de Pareto, en relación con el cual el principio 20/80 no puede reconocerse como un axioma, sin embargo, la esencia de la ley no cambia a partir de esto, ya que una pequeña parte, en comparación con una gran parte , afecta en mucha mayor medida al resultado final. la licenciatura.
Alcance
Dado que la ley 20/80 fue introducida por Pareto como resultado del conocimiento de un sociólogo sobre cómo las familias italianas gestionan el capital, es el sector financiero el que se considera más óptimo para su aplicación. El uso de esta ley le permite comprender en qué debe concentrarse exactamente al construir, así como al expandir un negocio, para maximizar las ganancias.
Es obvio que ciertos productos o servicios generan significativamente más ingresos que otros, pero no debemos olvidar que los clientes prefieren una amplia gama. Se sabe que el entorno del mercado es bastante volátil y, por lo tanto, los productos que no tenían demanda antes de cierto punto pueden eventualmente tener demanda y, por lo tanto, un negocio con un enfoque limitado es bastante riesgoso.
En relación con otras áreas, la ley de Pareto se puede aplicar en interpretaciones ligeramente diferentes, pero la tesis según la cual menos esfuerzo produce mayores resultados sigue siendo relevante.